5 cosas que puedes hacer hoy para renovar tu vida

Saca una tarde para conocerte mejor a ti mismo. ¿Recuerdas las preguntas que todos hacemos en una primera cita para conocer al otro? ¿Por qué no hacértelas a ti misma en la comodidad (y privacidad) de tu hogar, con una taza de té y tu cuaderno favorito?

Saca una tarde para conocerte mejor! Pregúntate lo que te gusta, lo que no te gusta, lo que más disfrutas, lo que tus hábitos dicen de ti, lo que consideras importante, tus sueños, tus deseos secretos, las virtudes que más valoras, las cualidades que mejor te describen, los rasgos más marcados de tu personalidad.

Nunca tengas miedo de conocerte profundamente: lo único que encontrarás es luz, belleza e individualidad.

Así no lo creamos, muchas veces tenemos una idea profundamente arraigada de cómo "debemos ser" y cómo "no debemos ser": de lo que debemos y no debemos pensar, de lo que debemos y no debemos sentir, de lo que debemos y no debemos hacer. Estas ideas generalmente vienen de nuestros padres, nuestra crianza y nuestra cultura.

Sin embargo, a veces no nos preguntamos si estamos de acuerdo con esas concepciones de lo que debemos y no debemos ser. A veces sólo las cumplimos ciegamente, así estén en total desacuerdo con lo que hayamos aprendido, lo que creemos, y los deseos más profundos de nuestra alma. Otra veces, no las cumplimos, pero nos sentimos profundamente culpables por no hacerlo.

Así que deja de pensar en cómo debes verte, ser, pensar, comportarte, sentirte y empieza a ser como eres. Recuerda: el Universo te hizo como eres porque así quería que fueras. Si hubiera querido que fueras diferente, te hubiera creado diferente!

Aprende a aceptarte, a apreciarte, a liberarte de la culpa y a valorarte tal cual eres en vez de criticarte, de castigarte o de negarte a ti mismo el amor que te mereces. Si quieres transformar tu vida, deja de ser lo que crees que deberías ser y empieza a ser tú. No te arrepentirás!

Hoy en día, pareciera que sacamos tiempo para todo: trabajamos, mantenemos nuestra casa en orden, cuidamos nuestra familia, organizamos nuestras finanzas, les hacemos favores a las personas que nos necesitan, hasta pasamos horas mirando fotos de personas que no conocemos en Facebook… pero tristemente, no nos tomamos el tiempo para hacer esas pequeñas y significativas cosas que nos alegran la vida, que nos hacen vibrar y sonreír desde el corazón: sentarte en un parque a mirar la naturaleza, leer tu libro favorito, escuchar la música que te encanta, tomarte un café en silencio mientras dibujas, ver una película que te toque el alma, compartir una tarde con un amigo que te hace reír, acostarte a mirar el cielo…

Saca un espacio para esas pequeñas cosas que te hacen vivir plenamente y disfrutar la vida. Después de todo, si tú no lo haces, ¿quién lo hará por ti?

Cuida tu cuerpo alimentándote sanamente, descansando apropiadamente y haciendo ejercicio.

Cuida tu mente aprendiendo a elegir lo que merece tu atención y lo que no, y eligiendo muy bien el tipo de cosas que lees, miras y escuchas en tu día a día.

Cuida tu alma sacando espacios para estar a solas contigo mismo y reconectarte con tu sabiduría interior, siendo amoroso contigo y con los demás, fortaleciendo tu fe, pasando más tiempo en la naturaleza, meditando al menos una vez a la semana y haciendo las cosas que te hacen vibrar.

Crea un plan de bienestar para ti mismo haciendo las cosas que mejor te hacen sentir. Escríbelo y ponlo en un lugar donde lo veas constantemente para no olvidarlo cuando el trajín de la vida te envuelva!

De una u otra manera, todos buscamos aceptación, aprobación, afinidad. Por eso sentimos un profundo deseo de parecernos a los demás, de sentir que pertenecemos a algo más grande. El problema es que, muchas veces confundimos este deseo de aceptación por la necesidad de ser aceptados por los demás.

Buscar aprobación de los demás no es la mejor forma de sentirte bien: más bien elige darte a ti mismo la aprobación que buscas en los demás! Así no tendrás que preocuparte por agradarle a nadie, por ser querido y por pertenecer porque ya te tendrás tu aceptación, tu cariño, tu aprobación y tuamor. Cuando ya te haya dado a ti miso todo eso, ¿qué más podrías querer?